Viajar es una pasión que ha llevado a muchas personas a explorar el mundo, descubrir nuevas culturas y experimentar la libertad que solo la carretera puede brindar. Para los amantes de la mochila, la habilidad de empacar de manera eficiente es esencial para mantenerse cómodos y seguros en sus aventuras, como ir a realizar trail- running, trekking, rapel, entre otros. Con más de una década de experiencia viajando por el mundo, he aprendido algunas lecciones valiosas sobre cómo hacer la mochila para un viaje sin sufrir las consecuencias de una carga excesiva. En este artículo, compartiré contigo mi sabiduría acumulada a lo largo de los años.
Paso 1: Elegir la Mochila Adecuada
El primer paso para hacer una mochila exitosa es elegir la mochila adecuada para tu viaje. Es importante tener en cuenta tu salud física, ya que todo lo que lleves en tu mochila deberás cargarlo contigo. Considera dos factores clave al seleccionar tu mochila:
El Tamaño: La capacidad de una mochila se mide en litros y debe adaptarse a la duración de tu viaje y tu físico. Para viajes largos de varios meses, una mochila de 50 a 60 litros es adecuada. Sin embargo, ten en cuenta que cargar mochilas muy grandes puede provocar problemas de espalda.
Un buen consejo es que la parte de la mochila que apoya en tu espalda no debe ser más larga que tu torso, medido desde la base del cuello hasta la cintura. Para viajes más cortos, especialmente a destinos cálidos, una mochila de 35 a 40 litros es ideal y, en la mayoría de las aerolíneas, puede ser llevada como equipaje de mano.
La Calidad de la Mochila: La calidad de tu mochila es fundamental. Para viajes largos, considera invertir en una mochila de buena calidad. Debe ser duradera, resistente al agua y cómoda de llevar. Comprar una mochila de mala calidad puede resultar en una experiencia incómoda y en la necesidad de reemplazarla durante el viaje.
Paso 2: ¿Qué Debes Llevar en la Mochila?
El contenido de tu mochila dependerá en gran medida del tipo de viaje que realizarás. Debes adaptar tu equipaje al destino, el clima y las actividades planificadas. Al empacar, es importante hacer una distinción entre lo que «quieres» llevar y lo que «necesitas». Aquí hay algunos consejos sobre qué considerar:
¿Lo Quieres o lo Necesitas?: Antes de empacar, coloca todo lo que planeas llevar sobre la cama y pregúntate: «¿Lo quiero o lo necesito?». Esta pregunta te ayudará a reducir significativamente la cantidad de cosas innecesarias en tu mochila.
Ropa: Calcula la ropa como si el viaje durara solo una semana. Opta por ropa que seque rápidamente, sea resistente a las arrugas y no tenga un alto valor sentimental. Las remeras térmicas son ideales para climas fríos, ya que son livianas y cálidas.
Calzado: Lleva dos tipos de calzado: zapatillas versátiles y sandalias cómodas. Escoge las zapatillas de acuerdo al clima de tu destino y elige sandalias con buen agarre y suela resistente si planeas caminar mucho.
Botiquín: Incluye un botiquín básico con curitas, gasa, antiséptico, protector solar y cualquier medicamento recetado que necesites. El resto puede comprarse en el destino si es necesario.
Navaja Multiuso: Una navaja multiuso es una herramienta invaluable en tus viajes. Ofrece múltiples funciones en un espacio compacto y es esencial para muchas situaciones.
Otros Artículos: Considera llevar un chubasquero, un candado, una lonita (para sentarte en la playa o cubrirte en lugares culturales), y un adaptador universal si viajas por múltiples países.
Paso 3: Cómo Cargar la Mochila
La forma en que cargas tu mochila es tan importante como lo que llevas en ella. Sigue estos consejos para cargarla adecuadamente:
- Coloca los objetos más pesados en la parte inferior de la mochila para mantener la estabilidad.
- No pongas nada incómodo en la parte que apoya en tu espalda.
- Los objetos que utilices con frecuencia deben estar al alcance en la parte superior o en bolsillos de fácil acceso.
- Si llevas líquidos, guárdalos en una bolsa hermética separada de tu ropa.
- Usa una funda impermeable para proteger tu mochila durante los traslados.
- Asegúrate de ajustar todas las correas y hebillas para que la mochila se adapte a tu cuerpo.
Siguiendo estos consejos, podrás preparar tu mochila de manera eficiente y disfrutar de tus viajes con comodidad. La experiencia de viajar como mochilero puede enriquecer tu vida, permitiéndote explorar nuevos lugares y conocer diferentes culturas. Si deseas aventurarte aún más, considera la posibilidad de participar en intercambios de trabajo o voluntariados, una forma económica y enriquecedora de explorar el mundo. ¡Buen viaje!